Horribles gráficos, grandioso y divertido juego.
¡Grandioso! ¡Excepcional! ¡Increíble! Podría seguir pero vamos a los aspectos concretos:
En primer lugar Minecraft es un juego de mundo abierto. Tenemos mundos aleatorios a nuestra disposición que se construyen aleatoriamente. Esto hace que la experiencia de juego sea diferente en cierto sentido ya que según avanzamos por el mapa encontraremos diferentes ambientes y climas, con diferentes animales y plantas.
A pesar de ser un mapa muy amplio no es infinito aunque podríamos pasar años construyendo sin llegar al final del mundo.
También habrá vida y mundo bajo el agua. Peces, calamares y océanos enormes que podemos recorrer en barca.
Hay que destacar también las infinitas posibilidades que se nos ofrecen para construir. A partir de tener la mesa de trabajo que se construye fácilmente con madera seremos imparables. El único límite que tienes es tu imaginación y las esferas ya que cabe recordar que en Minecraft todo se construye con cubos. Esta temática de cubos es una de las cosas que enamorar de Minecraft ofreciendo gran posibilidad de materiales y de colores con los que hacer todo lo que se te ocurra.
A pesar de ser un mundo de cubos hay cosas que tienen un tratamiento bastante especial. La lluvia aparecerá bastante definida al igual que el tratamiento de las sombras es muy importante y espectacular. La luz será algo importante en el título ya que de la oscuridad depende la aparición de determinados enemigos.
Todo esto, entre otras cosas, hacen que este enamorado de Minecraft a pesar de las malas críticas que se escuchan sobre el título. Para mí es un mundo de libertad donde crear cosas maravillosas, vivir aventuras, derrotar a poderosos enemigos, explorar profundas cuevas y pasarlo bien a solas o en compañía de mis amigos.